- Ivette + Gabi
Episodio 25 "Quiero ser perfectamente imperfecta"
Actualizado: 14 de dic de 2019
La perfección es el tema de este episodio. Y aunque ya lo hemos tratado
anteriormente en otros, como el no tener la navidad perfecta o dejar de querer
ser la madre perfecta, pues creemos que era necesario darle mayor profundidad
a este tema ahora que son épocas de estrés.

Primero, se define lo perfecto como aquello que tiene todas las cualidades
requeridas o deseables, que es muy adecuado para un determinado fin. Según
definicion.es, la palabra perfecto describe a la cosa, organismo o individuo que
reúne el más alto nivel posible de excelencia en relación con los demás
elementos de su misma especie o naturaleza.
En esta definición se ve ya, que parte del problema con la perfección es la
comparación (Episodio de Jeymi Febles “Quiero dejar de Compararme con
Otros.)” El problema es que la perfección no es algo que podamos obtener.
Perseguirla nos puede causar mucho daño emocional y hasta físico.
Según Brené Brown: El perfeccionismo es la creencia de que, si vivimos de
manera perfecta, nos vemos perfectos y actuamos perfectos, podremos
minimizar o evitar el dolor de la culpa, el juicio y la vergüenza.
Hay una gran diferencia también en querer ser sobresaliente y querer ser
perfecto.
El sobresaliente, el que busca la excelencia o el triunfo, al igual que el
perfeccionista quiere también triunfar. Pero el perfeccionismo se basa en el
miedo, su motivación principal es evitar el ridículo, el sentirse menos que otros,
el sentirse mal, el sentirse incómodo. (A mí, esto me suena bastante conocido, la
verdad)
En el blog www.thesimplyluxuriouslife.com escribe: el triunfador tiene impulso y
un perfeccionista es impulsado.
Y quizás muchos de lo que escuchamos estas frases, pensamos que no es con
nosotros. Y decimos: “Yo no quiero ser perfecta.” (Yo no soy perfecta) Así que
este tema no me sirve. Pero, en realidad siempre buscamos hacerlo todo
perfectamente o exigimos a otros a que lo hagan a la perfección
¿Cuáles son aquellos indicadores que nos dicen que sí intentamos ser perfectos
y nos estamos dando cuenta?
Segun el blogpost de health central escrito por Eileen Bailey, 20 señales de que
puedes ser un perfeccionista nos dicen:
• Tienes problemas siendo los segundos mejores en algo. (siempre tienes que
ser el primero)
• No haces actividades porque sabes que no serás el mejor, entonces mejor no
intentar. (Deportes, hobbies, carreras, estudios, etc)
• Si no lo vas a hacer perfecto, prefieres de una vez rendirte antes que hacerlo
mal.
• Crees que hay una manera buena y mala de hacer las cosas. (cuando
realmente hay miles de maneras de hacer algo)
• No hay puntos medios. (o está hecho a la perfección o es un completo
fracaso)
• Criticas mucho las fallas tuyas y de otros.
• Te obsesionas recordando tus fallas pasadas
• Te pones a la defensiva cuando los demás señalan tus errores.
• Quieres que todos te quieran y complaces a los demás en todo. Te molesta si
la gente no está contenta con tu trabajo o con lo que les das.
• Te cuesta conectar emocionalmente con otros porque no quieres ser
rechazado.
• Sabes que tus esfuerzos por alcanzar la perfección son imposibles y lo
ignoras de todas maneras.
• Te lo tomas muy mal cuando no llegas a los resultados de perfección
esperados.
• Continúas trabajando en proyectos así ya hayan sido completados, solo por
querer que estén perfectos.
• Te alivia que otros fallen, porque te refuerza la idea que sólo tu eres “el
mejor”
• Detestas que otros te vean fallar.
• Haces solo cosas que tengan un propósito. No tienes hobbies, o momentos
de ocio en donde te relajes.
• Necesitas tener el control de todo. O sea, nadie lo hace mejor que tú, nada
de lo que hacen los demás es lo suficientemente bueno. Crees
fervientemente en el adagio popular de que, si quieres que algo salga bien,
debes de hacerlo tú mismo.
Y uno más que añadimos: Nos comparamos incesantemente con lo que hacen
los demás.
¿Te identificas con algunos de estos?
Tener algunos de estos no significa que eres un perfeccionista, pero si te
reconoces en varias de estos, puede ser que si lo seas.
Nuestros hijos también pueden sufrir del perfeccionismo si nosotros somos
perfeccionistas, pues lo modelamos para ello.
Por otro lado, ¿cuáles son las características de una persona que busca el
triunfo y se esfuerza?
Según la coach Keren Borras nos dice que aquellos que buscan la excelencia:
• Saben que la satisfacción viene desde el interior de nosotros mismos.
• Reconoce sus cualidades positivas.
• Aceptan errores como parte de las lecciones de la vida.
• Enfatizan el mantener un equilibrio en la vida.
• Te aceptas como un ser valioso, no perfecto.
¿Pero que tiene de malo ser perfeccionista?
Pues, buscar el perfeccionismo nos puede llevar sentirnos mal con nosotros
mismos. El querer ser perfecto es algo que no se puede lograr. Somos
imperfectos. Sobresalimos en unas cosas, carecemos de otras. Somos como el
yin y el yang. Tenemos el lado Jedi de la fuerza y el lado obscuro de la misma.
Además esta búsqueda puede llegar a dañar nuestro cuerpo y nuestra mente.
La perfección nos empuja a que seamos los mejores hasta cuando estamos
cansados, exhaustos, sin ánimos (y hasta enfermos). Ignoramos como nos
sentimos y simplemente seguimos. Luego pagamos precios muy altos en
nuestra salud física y emocional.
Un artículo de la BBC explica que las tendencias perfeccionistas se han
relacionado con una larga lista de problemas clínicos:
-Depresión y ansiedad (incluso en niños),
-Autolesiones,
-Trastorno de ansiedad social y agorafobia (miedo a estar en público o en
situaciones que pueden producir pánico),
-Trastorno obsesivo compulsivo,
-Atracones de comida,
-Anorexia,
-Bulimia y otros trastornos alimentarios donde se controla excesivamente lo que
se come.
-Trastorno de estrés post traumático,
-Síndrome de fatiga crónica,
-Insomnio,
-Acumulación o acaparamiento de cosas,
-Dispepsia (problemas digestivos, náuseas, acidez estomacal, diarrea, etc),
-Dolores de cabeza crónicos
- y, lo más condenatorio de todo, mortalidad temprana y el suicidio.
Este mismo artículo nos revela algo muy interesante: El perfeccionismo no es un
comportamiento. Es una forma de pensar sobre ti mismo.
Para explicarlo mejor, pongamos un ejemplo. Pero antes déjame decirte que ser
diligente, esforzarse para conseguir algo, trabajar duro, buscar la excelencia
está muy bien. Ese no es el problema. El problema es el dialogo interno que
tenemos con nosotros.
Ahora sí, el ejemplo: Tenemos un estudiante que se esfuerza por obtener la
mejor nota en una materia que se le hace difícil. Este estudiante estudia
muchísimo, da el examén y cuando le llega la calificación no obtiene la nota más
alta, es una nota regular. La diferencia entre el que busca el triunfo (High
Achiever) y un perfeccionista es que esta persona se dice, “bueno, saque una
nota regular pero eso no tiene nada que ver con quien soy yo, sigo siendo una
buena persona, soy valioso más allá de mis notas y sigo adelante.” En cambio el
perfeccionista se dice: “Soy un fracaso, no doy la talla, no soy lo suficientemente
bueno, no sirvo para nada.” Y puede ser que se dé por vencido. Porque si no es
perfecto, no vale.
Esa voz interna que quiere que seamos perfectos nos puede afectar en
diferentes facetas de nuestra vida:
• La vida en pareja.
• Tu faceta de madre o padre
• Los estudios
• En lo Laboral
• Hasta en nuestros momentos de ocio.
• Mi cuerpo (Estoy gorda, me siento fea, estoy vieja)
• Tu lado fitness (Debería de ser más rápida, hacer más repeticiones. Aunque
esté cansada, enferma, tengo que ir al gimnasio)
La perfección ama la vergüenza. Ama que nos quedemos callados y no seamos
quien realmente somos. Pretendemos estar bien. No se nos puede ver quebrar.
La autora Brené Brown en su libro: Los regalos de la imperfección nos dice que
aquellos diálogos internos están constantemente recordándonos que no somos
lo suficiente.
• ¿Qué va a pensar la gente?
• Realmente no puedes amarte a ti mismo todavía. No eres
_________________ suficiente (bonita, delgada, exitosa, rica, talentosa,
feliz, inteligente, femenina, masculina, productiva, agradable, fuerte, dura,
cariñosa, popular, creativo, querido, admirado, colaborador)
• Nadie puede averiguar acerca de mis defectos o imperfecciones.
• Voy a fingir que todo está bien
• “¡Voy a cambiar para encajar si tengo que hacerlo!
• ¿Quién crees que eres para poner tus pensamientos / arte / ideas /
creencias / escribir en el mundo?
• “Cuidar a otros es más importante que cuidarme a mí”. (Algo que
pregonamos muchas madres en donde el patriarcado y la sociedad nos dice
que una madre perfecta se sacrifica por los demás y se deja siempre de
último.)
Y bueno, todos tenemos alguna de las tendencias mencionadas, pero ¿qué
podemos hacer para abrazar la imperfección?
La más importante es la aceptación de uno mismo. Aceptarnos tal y como
somos y tener auto-compasión.
Según Tara Brach, la autora del libro Aceptación Radical, la mayoría de
personas que empiezan el largo camino de la auto-aceptación cuestionan que
ésta les impedirá mejorar en sus vidas. Es decir, si me acepto tal y como soy,
nunca voy a querer mejorar, de hecho sería demasiado tolerante conmigo y me
voy a convertir en más de aquello que no me gusta de mí. La respuesta que ella
nos da a esto le pertenece al psicólogo humanista americano Carl Rogers. El
dijo: La curiosa paradoja es que, cuando me acepto como soy, entonces puedo
cambiar.
Adoptemos una vida Wabi Sabi. Wabi Sabi es apreciar la perfecta imperfección.
Wabi significa simplicidad rústica (la mentalidad menos es más) y Sabi es
encontrar el placer en la imperfección. Esto es una estética tradicional japonesa
en el cuál tu miras la vida desde la aceptación de la transitoriedad y la
imperfección. Desde el ángulo Wabi Sabi, lo más bello es aquello que es
impermanente, incompleto, imperfecto: “Nada dura, nada está terminado y nada
es perfecto.”
Como cultivar la auto compasión:
• Practicar el mindfulness: El mindfulness tiene que ver con aceptar lo que
pasa a nuestro al rededor y aceptar con lo que sentimos sin recriminarlo, sin
cambiarlo.
• Practica el agradecimiento. Enfocarnos en lo que hacemos bien, lo mucho
que nos da la vida. etc
• Usa un diálogo interno positivo. Si te escuchas decir algo malo sobre ti
mismo. Soy mala o alguna cosa así. Pues detente a pensar que no deberías
de decirte esto y detenlo de freno. (Episodio de voy a dejar de ser tan
desgraciada conmigo misma)
• Perdónate. Si hacemos algo mal o hacemos sentir mal a alguien pues
seamos nuestros amigos en ese momento. Intenta decirte: “Cometí un error y
me siento mal por eso. Me perdono y voy a aprender de esta experiencia.
• Mantén un estilo de vida saludable. No solo se trata de cuidar tus emociones
y pensamientos. Tu cuerpo es importante. Come comidas sanas y a sus
horas, Ejercita, duerme lo suficiente (se dice que mínimo 8 horas), toma más
agua.
Artículos y libros usados en este Podcast
Los peligros del Perfeccionismo
El perfeccionismo propicia la adicción al trabajo
La diferencia entre el perfeccionista y el sobresaliente
8 señales que eres un perfeccionismo
20 señales de que eres un perfeccionismo